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Baetulo, un paseo por la Badalona romana
¿Cómo era Badalona hace más de dos mil años? Los romanos la fundaron con el nombre de Baetulo y durante muchos siglos estuvo a la altura de la vecina Barcino. Hoy te invitamos a un paseo para conocer una ciudad de la Antigüedad.
En Cataluña hay ciudades romanas célebres como Tarraco o Barcino, sin olvidar tampoco a Empúries con yacimientos que se remontan a los griegos. Pero existen otros lugares que también pueden presumir de una gran herencia cultural y patrimonial de la Antigüedad, ese es el caso de Badalona, cuyos restos arqueológicos revelan la importancia que tenía hace dos años.
Los romanos fundaron Badalona hacia el año 80 a.C. (70 años antes que Barcino) en los últimos días de su República y le dieron el nombre de Baetulo. Más allá de las diferencias en las fechas que se puso la primera piedra, las dos ciudades tuvieron orígenes casi paralelos.
Otra semejanza es que Baetulo y Barcino se fundaron en ubicaciones con características similares, sobre montículos cercanos al mar —la costa hace dos mil años era diferente a la actual, con el mar más adentro—. También se levantaron en lugares donde previamente no había una gran población de íberos.
Más parecidos, la evolución de Baetulo y Barcino fue casi en paralelo durante los tres primeros siglos de vida de ambas ciudades. Las dos ocuparon una superficie similar —alrededor de las 10 hectáreas—.
La Badalona romana es un ejemplo de manual del urbanismo de esta civilización. La arqueología nos muestra sus calles perfectamente trazadas en torno a las dos avenidas principales: el cardus (calle principal trazada de norte a sur) y el decumanus (que recogía el eje este-oeste) Mientras que la antigua Barcelona tuvo un desarrollo urbanístico más irregular.
Tampoco hay que olvidar que las dos ciudades se ubicaban en la Vía Augusta, que antes de ser una calle de Barcelona era la principal carretera romana en el este de Hispania y que conectaba la provincia de la Tarraconensis con los territorios del imperio al otro lado de los Pirineos.
¿Cómo era la vida en la Badalona romana?
La vida en Baetulo se articulaba alrededor del foro, como sucedía en toda ciudad romana. Este punto coincidía con el lugar donde se cruzaban el cardus y el decumanus. Hoy solo ha quedado un muro de este punto neurálgico, pero pueden verse otros restos arqueológicos de los importantes edificios que existían en el centro de la Badalona antigua.
Por ejemplo, estaban las termas de Baetulo. Un lugar clave en la vida social romana. Los badaloneses de la Antigüedad no solo iban a disfrutar de las propiedades saludables de sus aguas, sino que también aprovechaban para hablar con sus conciudadanos de los asuntos que les preocupaban (que eran los mismos que a nosotros): la situación política, el precio de los alimentos, los impuestos…
Estas termas tenían tres salas principales. Una con aguas frías, frigidarium, otra con piscinas templadas, tepidarium, y otra para baños calientes, caldarium.
¿Podían ir todos los ciudadanos libres de Baetulo? Las mujeres solo podían ir por las mañanas. También era un lugar donde podían practicar deporte como jugar a pelota y levantar pesas.
Como otras ciudades romanas, el comercio y la artesanía centraban buena parte de las ocupaciones de los habitantes de Baetulo. Además, la ciudad se hizo famosa porque las villas cercanas, que eran relevantes centros productores de vino que se exportaba a otros puntos del imperio.
La bonanza económica que disfrutó Baetulo durante tantos años le permitió contar con su propio teatro, con una capacidad para 1.800 personas, donde podían verse interpretaciones de obras dramáticas, griegas y romanas.
En cuanto a las viviendas de sus habitantes, las clases más favorecidas vivían en la parte alta de la ciudad (la zona que corresponde con el actual barrio de Dalt de la Vila). La arqueología ha encontrado villas romanas en Baetulo muy destacadas como la Casa dels Dofins.
La Casa dels Dofins llama la atención por los mosaicos y pinturas murales que se encontraron en un buen estado de conservación durante los trabajos arqueológicos. También se han encontrado las estancias destinadas a la producción del vino, en una muestra de la importancia de esta actividad que te explicábamos antes.
Tampoco podemos olvidarnos de la Casa de l’Heura. Otra vivienda de las clases pudientes de Baetulo. También se han encontrado estancias dedicadas a la actividad vinícola y aquí destaca que los arqueólogos descubrieron el oecus, o comedor de verano, una de las principales estancias para la vida familiar romana.
Por lo tanto, Baetulo fue una ciudad que podía equipararse perfectamente a Barcino por importancia urbanística, económica y social durante buena parte de la época romana. Los destinos de ambas ciudades se separaron a partir del siglo IV d.C., mientras Barcelona mantuvo cierto esplendor, la Badalona romana no pudo recuperarse de las primeras crisis políticas y económicas que afectaron al imperio al comienzo de su declive.
Una buena manera de conocer de primera mano Baetulo es acudir al Museo de Badalona. Allí encontrará 3.400 metros cuadrados con restos de época romana en un magnífico estado de conservación, con lugares que corresponde a la zona cercana al antiguo fórum. También hay diversas piezas de la época para conocer mejor cómo vivían los habitantes de Baetulo. Una excelente opción para hacer un viaje en el tiempo con toda la familia.
Y de cara a la primavera, ya es toda una tradición badalonesa que el último fin de semana de abril se celebre el Magna Celebratio, el festival romano de esta ciudad donde se apuesta por la recreación histórica para dar a conocer este momento de la Antigüedad.
Más información:
Ciudad romana de Baetulo Museo de Badalona
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